¿Es importante medirse la tensión?
La tensión arterial puede ayudarnos a prevenir enfermedades y a controlar que el “ritmo” del cuerpo sigue el camino correcto. Medirla es sencillo y lo podemos hacer en casa, en la farmacia o centro de salud.
La mayoría de farmacias disponen de tensiómetros en los que se pueden conocer los dos componentes de la tensión arterial: la presión sistólica, la que se produce si el corazón se contrae, y la presión arterial diastólica, la que tiene lugar entre los latidos del corazón.
Aunque podemos medirnos la tensión en casa, siempre que dispongamos de un tensiómetro, es aconsejable medirla en una farmacia y/ o en centros de salud; ya que en el caso de que esta sea alta o baja tendremos cerca un profesional que nos dirá que tenemos que hacer para solucionarlo. En el caso de que nos la medimos en casa y nos aparezca alta o baja se recomienda acudir a tu centro de salud y/o a tu farmacia de confianza.
¿Cuáles son los niveles normales de presión arterial?
La presión arterial normal. Los niveles máximos de presión arterial sistólica, es decir la máxima, están entre 120-129 mmHg, y las de diastólica, es decir la mínima, están entre 80 y 84 mmHG. Cifras más bajas también pueden considerarse normales, si no provocan ningún síntoma.
La presión arterial normal-alta. Los niveles de presión arterial sistólica, es decir máxima, están entre 130-139 mmHg y los niveles de presión diastólica, es decir máxima, están entre 80-89 mmHg.
Tensiómetros para farmacia
En este contexto, el tensiómetro para farmacia CPM de Expofarm ayuda al farmacéutico en el proceso de la toma de tensión a sus pacientes ofreciéndole los valores de la presión arterial sistólica, diastólica y ritmo cardiaco junto con una tabla con los valores normales.
Además, Expofarm también dispone del punto de salud Eros con el que el farmacéutico puede medir la tensión de sus pacientes; además de hacerles 17 pruebas distintas más, siempre que el paciente lo desee. Una de las ventajas del punto de salud Eros en la toma de tensión es que los datos quedan guardados en el historial del paciente junto con las demás pruebas, lo que permite tener una visión más amplia de la evolución del mismo.